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Es muy, muy importante que obedezcas a tu madre en todo, pero, principalmente cuando ella te diga: Vete al dentista.
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Es muy importante que lo hagas y lo hagas antes de comer kilos de dulces en las fiestas Navideñas. Créeme.
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Porque si no lo haces, en un sábado cualquier, de un enero cualquier podrás tener un dolor tan fuerte de dientes y no habrá un dentista siquiera en la mier** de la ciudad para atender a una EMERGENCIA.
Créeme.
Besos
Con amor
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Eneko también te escucha.